El pueblo de Asuka, en Japón, guarda un antiguo secreto megalítico. Esconde varios montículos de piedra de granito que han sido cortados con formas inusuales. El mayor y más llamativo de ellos se conoce como "Masuda-no-iwafune". [Ver video]
Con un peso aproximado de ochocientas toneladas, la Roca mide treinta y seis pies de largo, veintiséis de ancho y quince de alto. La parte superior de la piedra ha sido cortada y presenta dos agujeros de precisión de un metro cuadrado cada uno, que continúan hasta el fondo de la piedra.
En la base de la piedra hay hendiduras en forma de celosía, que indican algún proceso desconocido utilizado utilizado por los constructores para dar forma a la roca.
En la región en la que se encuentra Masuda no iwafune, hay muchos templos y santuarios budistas que pueden sugerir que la talla fue realizada por budistas, quizás con algún tipo de propósito religioso o ceremonial. Sin embargo, Masuda no iwafune no se parece al estilo ni a la construcción de ningún otro monumento budista.
El por qué o el cómo se fabricó esta piedra colosal y otras similares sigue siendo un misterio, ya que parecen ser de un estilo arquitectónico diferente al de las construcciones budistas de la época posterior.
Los Teóricos de los antiguos astronauta creen que Masuda-no-iwafun, podría representar un barco del cielo narrado en la mitología japonesa. De hecho, una sugerencia proviene del propio nombre de la roca, "Masuda-no-iwafune", que se traduce como "la nave de roca de Masuda".
Ellos van más allá diciendo que podría tener una conexión con una antigua historia de una extraña visitante ocurrida más al norte, en la costa oriental de la provincia de Hitachi.
un extraño ovni redondeado fue arrastrado a la orilla por unos pescadores en 1803. Tres textos similares describen el "Utsuro-Bune" (barco hueco) redondo y a una ocupante femenina encontrada viva en su interior.
El barco hueco, de seis metros de ancho y casi cuatro de alto, tenía placas y barras de metal con ventanas de cristal. Se dice que se asemeja a un gran quemador de incienso. Se abrió una escotilla y salió una joven que parecía tener entre 18 y 20 años.
Hablaba un idioma irreconocible y llevaba ropas de telas que los aldeanos nunca habían visto. En el interior de la "nave" había una extraña escritura y más materiales únicos que comparaban con sábanas o alfombras.
¿Pudieron los antiguos habitantes de la zona haber sido testigo de otro evento similar al de Utsuro-Bune hace mucho tiempo atrás, e intentaron representar el extraño vehiculo del visitante en una piedra? ¿Es esta estructura la representación de un OVNI o algo más? ¿cuál es la naturaleza de esta piedra y cuál es su propósito? ¿Quién la hizo, cuándo y por qué? Lamentablemente, no hay respuestas definitivas a estas preguntas.